domingo, 19 de febrero de 2012

Capitulo 40.


Ya estaba de regreso a casa. Lucia estaba contenta por lo que acababa de hacer aunque se sentía un poco mal por Marc. Por un lado, le había dejado todo claro y había sido una mañana perfecta con José, aunque todas eran perfectas. Pero por otro lado, se sentía un poco culpable. Pero, ¿por qué? Él tuvo su oportunidad y la hizo mucho daño. Pero por alguna razón se siente muy mal. Tal vez muy en el fondo de su corazón, todavía está Marc. ¡No! Se niega. ¿Por qué la vida es tan caprichosa? Ahora tiene un chico que la quiere y que es perfecto. En que líos se mete. ¿Por qué en ese preciso momento Marc se interesa por ella? Tal vez si lo llega hacer hace unas semanas… tal vez. Pero ahora no.
*Toc toc*
-Pasa.- dijo Lucia.
-Hola, hija. ¿Qué tal?
Lucia pensó unos instantes antes de contestar. ¿Era el momento? Quizá muy repentino. Será esta noche cuando ‘’salgan’’ juntos.
-Sí, mamá. Todo va bien.
-¿Ya tienes ropa para esta noche?
-Hmmm. Sí. Sobre las 19:30 me arreglo.
-Vale.
La conversación fue un poco fría. Lucia no tenía ganas de hablar. Lo único que quería hacer para quitarse ese mal cuerpo era estar con José, pero todavía era muy pronto. Tras pensar unos segundos, decidió darse una ducha. Fue una ducha relajante. Le costó salir del agua que estaba a una temperatura perfecta. En unos instantes recordó algo que casi la hizo resbalar. El miércoles dan las notas. La mayor parte del curso, había sacado buenas notas, pero las últimas semanas la fue imposible concentrarse. Demasiadas distracciones. Con un suspiro de esperanza, se secó. Al volver a la habitación, se dio cuenta de que la habían mandado un mensaje:
‘’Hola. Siento mucho no haberte podido decirte esto a la cara, pero por un momento me di por vencido. Lo único que me has demostrado al haber venido hoy a mi casa es que todavía te importo algo. Y con ese algo me basta. Al pensarlo detenidamente, me he dado cuando de que si me rindo, no sería yo mismo. Así que, perdón si causo molestias pero no te voy a dejar escapar otra vez. Marc.
Lucía cada vez estaba más confusa. En el fondo de alegró de haber recibido ese mensaje, pero por otro lado, le odia. Posiblemente, si no aclara sus sentimientos, hará daño a los dos. Estaba a punto de responderle cuando una voz la llamó:
-Lucia, a comer.
-¡¡Ya bajo, mamá!!

9 comentarios: