-Mándame
una videollamada.- dijo Lucia.
-Sí, sí.
Es lo que llevo intentando hacer desde que te tenía agregada.
-¿No
sabes?
-Pues no
mucho. No me considero un experto en redes sociales.
-Ya lo
veo. Jajaja. Anda quieto, a ver qué tocas. Ya envío yo.
-Ok.-dijo
José.
En pocos
instantes en su pantalla recibió una videollamada. No dudó en aceptar. En poco
tiempo se podían ver sus caras a través de dos cuadros pequeños a la izquierda
de la conversación. Ambos estaban igual que esta mañana.
-Hoola,
¿se me escucha bien?- dijo Lucia.
-Sí, ¿y a
mí?
-Perfecto,
como tú.
Ahora
Lucia sí podía ver a José ponerse un poco rojo.
-Jajaja,
¿recuerdas que ahora te puedo ver, no?- dijo Lucia sonriente.
-Ams sí. Bonitos
cascos.
Lucia se
miró a través del cuadrado que tenía su cara. No se acordaba.
-Sí. Es
que me los puse para escuchar el CD y no me los he quitado.- dijo Lucia
sonriendo.
-Oye,
¿tienes hora?
-Sí son
las 18:30h.
José se
quedó asombrado, no alzó el brazo para mirarlo en su reloj.
-¿Te la
sabes de memoria, o qué?
-Jajaja.
No, ¿por qué lo piensas?
-Porque
te he estado mirando y no has levantado el brazo para mirar el reloj.
-Ains,
que tonto eres. Tú también tienes hora a mano. Debajo de la pantalla tienes una
barra y a la derecha del todo, te marca la hora.
-¡Ah! No
lo sabía.
Lucía
sonrió. Aquello le recordaba a un capitulo de ‘’Modern Family’’ sobre todo, a
la canción del termostato.
-¡¡¡¡José,
baja y ayúdame!!!!- dijo su madre.
-Oye,
Lucía…
-Lo he
escuchado. Anda vete y ayuda a tu madre.
-¿Quieres
que me vaya?
-Pues
claro que no. Me pasaría todo el día hablando contigo.
-¿Y, la
noche?
-Hmm, ¿es
una proposición?
-Puede…
-¿A qué
hora?
-Sobre
las 12.
-Te
estaré esperando.
-Vale,
adiós. Te quiero.
-Te
quiero, cuídate.
-Hasta
luego.
José
cerró la conversación y corrió a ayudar a su madre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario